Las compras de bienes de capital provenientes del exterior aumentaron un 69%, marcando una cifra récord
Ante un incremento del 34,4% en la importación de bienes de consumo, los de capital aumentaron un 69%, rozando los valores récord de 2018. Es decir, a la par de bienes como ropa, calzado, electrodomésticos y alimentos, se encuentran los bienes de capital que dieron un importante salto y van rumbo a alcanzar los niveles más altos de la serie.
Según datos de la Cámara de Importadores de la República Argentina (CIRA) entre enero y mayo el ingreso de bienes de capital del exterior se ubicaron en casi USD 1200 millones mensuales, con una participación que ronda el 20% de las importaciones totales.
A su vez, entre 2003 y 2024, la participación de los bienes de capital rozó el 19%. Sin embargo, durante 2021 y 2024, cayó al 16%, por lo que, según CIRA, en 2025 dicha participación se está recuperando.
Los rubros con mayores importaciones de bienes de capital
En la segmentación, el subgrupo Equipos de transporte industriales experimentó el mayor incremento a partir de una variación interanual de 127%, pasando desde los USD 523 millones en 2024 a USD 1.185 en el presente año.
Luego, aunque en menor proporción, creció la importación de computadoras y teléfonos. Asimismo, los 4 principales productos que explican el incremento de bienes de capital son tractores de carretera para semirremolque, vehículos para transporte de mercancías con carga máxima menor o igual a 5 toneladas y computadoras portátiles.
Esto se explica, en parte, por el despertar de un fenómeno en el sector privado: “aprovechar” las condiciones actuales. Estas se resumen en un dólar barato o competitivo y la apertura importadora, permitiendo incorporar maquinaria en diversos sectores.
Es decir, las empresas que tienen un respaldo para soportar la crisis actual, aprovechan a traer equipos importados para cuando el consumo se recupere, pudiendo ofrecer más calidad.
Cabe mencionar que, durante el primer trimestre del 2025, la inversión en maquinaria y equipo fue la mayor de la historia para un primer trimestre. En pocas palabras, los empresarios se preparan para el momento en que la recesión concluya y vuelva el consumo.